El reelecto senador está dispuesto a intenta la pelea por la conducción del partido. Busca desquitarse de traiciones que se dieron durante el armado de listas.
Por Exequiel Flesler
En el instante mismo en que se termina de contar cada uno de los votos de un comicio, los que tienen por oficio la política comienzan a pensar en el próximo momento importante en sus vidas: la siguiente elección.
Con esta consigna como modo de vida y proceder, los hombres y mujeres del Pro entrerriano están pensando en 2021 y 2023 y, también, en la elección partidaria.
En Entre Ríos queda una principal incógnita a despejar en el partido político que fundó el presidente de la Nación en retirada, Mauricio Macri. La duda es la misma que sobrevoló al espacio en muchos de los últimos años: ¿Qué hará Rogelio Frigerio?
En una entrevista reciente, la primera después de las elecciones del 27 de octubre, el ministro del interior contó sobre el después del 10 de diciembre: “Me tengo que conseguir un trabajo”.
Descartemos la posibilidad de que se retire de la política. La pregunta es qué hará, a quién apoyará o que tanto está dispuesto a meterse en la provincia en la que tiene domicilio.
El Pro entrerriano está presidido interinamente por el senador provincial reelecto Francisco Morchio (Gustavo Hein tomó licencia). Éste debe convocar a elecciones para el año próximo, para el 2020.
Aquí la novedad. Esta vez Alfredo De Angeli estaría dispuesto a dar la pelea por la presidencia del partido. “Tiene ganas de conducir, dentro del Pro”, dicen en su entorno. Ahora vendrá el momento de buscar aliados. La rosca, en palabras de Emilio Monzó.
Cuentan como propios y aliados, desde el sector del senador nacional, a referentes de ambas costas de la provincia. La del Paraná y la del Uruguay.
En Concordia cuentan a Roberto Niez, el hombre fuerte del Pro en la capital del citrus, de la pobreza y del peronismo. El otro nombre en esa ciudad es Joaquín Lamdrid, aún diputado provincial, pero quedó enfrentado a De Angeli cuando, junto a Gustavo Hein y con la venia de Frigerio, quisieron correr a Alfredo de la candidatura por la senaduría para ubicar al intendente de la Capital del Riel en ese lugar. Hein quedó relegado a una diputación. Pobre.
El otro territorio en disputa es Paraná. Aquí De Angeli piensa en Emanuel Gainza. El concejal es conocido y, si bien perdió en la interna ante Sergio Varisco, tuvo una revalida de votos suficientes como para inclinar la balanza en una elección interna. Por otra parte, acompañaría al senador en su labor en la Cámara Alta.
Con estos nombres y, en definitiva, con sus votos, De Angeli estaría dispuesto a dar la interna para conducir el partido. Dicen que “a Alfredo es al único al que no le intervendrían el partido”. Otro dato: no quieren lista de unidad, el que no esté de acuerdo que no se integre. Que de una interna.
Así las cosas, de aquí a fin de año se vienen semanas movidas en el Pro. El 2020 será un año de reestructuración (del espacio político, la deuda es un problema que le dejaron a Alberto). Ya sin Frigerio como capataz, Alfredo De Angeli está dispuesto a asumir el rol de conductor.
