"Hasta acá llegaron la desidia, la indiferencia y la ilegalidad", dijo el intendente en el acto de jura. Fue un discurso duro con menciones a las finanzas, los empleados y el estado general del Municipio.
Por Exequiel Flesler
Esta mañana en el Teatro 3 de febrero Adán Bahl y Andrea Zoff juraron como intendente y viceintendenta, respectivamente, de Paraná.
El acto contó con la presencia del gobernador reelecto, Gustavo Bordet, la vice electo Laura Stratta. También se hicieron presentes legisladores nacionales y provinciales y los concejales de la ciudad de las distintas bancadas.
En la ceremonia también se tomó juramento al Gabinete de Secretarios.
Luego, el intendente dio un duro discurso sobre el estado de cosas en que se encuentra el Municipio. No ahorró en datos ni adjetivos para describir la situación en que dejó la ciudad la Administración Varisco.
“Hoy comienza un nueva época en Paraná”, afirmó Bahl con una frase que remitió al discurso de Alberto Fernández en la plaza ayer por la tarde: “Es el comienzo de un nuevo tiempo”. “Estamos decididos a vivir en una ciudad digna, una ciudad que nos cuide a todos», agregó.
“Hasta acá llegó la decadencia. Hasta acá llegaron la desidia, la indiferencia y la ilegalidad. Es hora de comprometerse y trabajar en serio para que podamos vivir mejor. De construir y construir, arreglar, ordenar y poner en marcha”, sentenció Bahl en unos de los pasajes finales y más severos del discurso.
Estado de cosas
“Sé que se ha quebrado la confianza entre los vecinos y su municipio. El desgobierno que sufrimos en Paraná en los últimos meses se ha venido agravando y complicando sin pausa. Y llegamos a un estado de situación que ya no se aguanta”, afirmó el intendente.
«La gestión que termina incrementó de manera irresponsable su planta de personal. En pleno proceso electoral, contrató a más de 1100 personas sin previsión presupuestaria, estafando a muchos paranaenses con una promesa de trabajo que no se puede cumplir», marcó sobre el incremento de contratados durante el último año. Algunos de los cuales aún acampan frente al edificio municipal.
“La deuda hoy asciende a más de mil millones de pesos, aproximadamente un cuarto del presupuesto municipal”, dijo y marcó que podría hacerse con ese dinero: “Con ese dinero se podrían comprar 180 compactadoras 0km para el servicio de recolección de residuos. Y hoy solo tenemos 4 o 5 en funcionamiento”.
“Con ese dinero se podrían adquirir más de 100 colectivos urbanos 0Km. Se podrían pavimentar 600 calles nuevas. O repavimentar 1.700 cuadras con mezcla de asfalto en caliente”, agregó.
“Con ese dinero se podrían pagar 5 meses de salarios a todos los empleados municipales. Sin embargo, esta gestión generó un contexto de extrema incertidumbre para sus trabajadores. ¡En menos de seis meses quebraron la municipalidad!”, abundó.
“La irresponsabilidad de quienes han gobernado la ciudad hasta hoy ha dejado a Paraná inmersa en un caos sin precedentes y ha llevado a los paranaenses a una situación de fragilidad y fastidio extrema que nos afecta a todos”, denunció.
El futuro
“Hoy empezamos a trabajar para que Paraná deje de darnos vergüenza y vuelva a ser nuestro mayor orgullo. No va a ser fácil, ni de un día para el otro. Paso a paso, lo podremos hacer”, prometió.
“El cambio que queremos ver y vivir en Paraná depende de lo que seamos capaces de hacer juntos. No puede ser el proyecto de un solo hombre o de una gestión, sino la gesta de todo un Pueblo. Por eso los convoco a todos y a todas”, pronunció a modo de convocatoria.
“Vamos a poner en marcha un municipio que trabaje al servicio del vecino y se ponga al frente del desarrollo de la ciudad; para que Paraná pueda transformar su potencial en oportunidades concretas”.
“No tengamos dudas de que #Paraná puede sanarse y proyectarse. No será una tarea fácil, pero Paraná puede volver a ser la gran capital de provincia que la historia nos recuerda y el futuro nos exige”.
“Es hora de comprometernos y trabajar en serio para que podamos vivir mejor. De construir y reconstruir, de arreglar, de ordenar y poner en marcha. ¡Cuentan conmigo!”.
“Y es muy esperanzador que hoy tengamos un nuevo gobierno en la nación, un gobierno que tiene la prioridad de retomar la senda del trabajo argentino, la defensa de los derechos de las mayorías y la lucha contra el hambre”
“Para que las nuevas generaciones hereden una Paraná mejor que la que nosotros recibimos; una ciudad cuidada, desarrollada, fortalecida, que los inspire y los potencie. Esa ciudad depende hoy de todos nosotros”, arengó sobre el final de su discurso.
